Petroleros afirman que militarización de muelles no evitará protestas en Zulia

Cerca de 600 militares custodian 16 muelles en Lagunillas. Denuncian amenazas de muerte contra dirigente sindical de la Costa Oriental del Lago
Dirigentes petroleros se pronunciaron ayer en contra de la militarización desde la madrugada del jueves de los accesos a los muelles de Lagunillas, en la Costa Oriental del Lago, y aseguraron que el despliegue de cerca de 600 efectivos militares en la zona no frenará las protestas de los trabajadores que exige al Gobierno que respete sus derechos al empleo luego de la nacionalización de empresas contratistas en mayo pasado.
José Contreras, directivo del Frente para la Defensa del Trabajo y la Propiedad Privada en la Costa Oriental del Lago, relató que un contingente de 600 soldados del Ejército y Guardia Nacional ocuparon desde las 2:00 am. del jueves los accesos a los 16 muelles del municipio Lagunillas.

"Estamos consternados con lo que nos está pasando. Tienen un estado de sitio en la COL, porque ni siquiera dejan salir a la gente al frente de sus casas en el sector Las Morochas de Lagunillas. El gobierno está cayendo en la peor de las atrocidades, pues nos está llevando a perder nuestras libertades democráticas, nuestras libertades de tránsito. Estamos en una situación aciaga", lamentó.

El representante de Consecomercio detalló que cerca de 25 motos de la Guardia Nacional se mantuvieron circulando el viernes por la avenida Intercomunal de Lagunillas, específicamente entre Tamare y Las Morochas, para detectar cualquier foco de manifestaciones.

"Quieren que la gente se atemorice, que tenga miedo. Los funcionarios están vestidos con equipos antimotines, pero las protestas continuarán en la misma medida que el hambre esté presente. El hambre es el líder más fuerte que está creciendo en la COL", declaró.

Pablo Medina, integrante del Movimiento 2-D, Democracia y Libertad, visitó antenoche la Costa Oriental y expresó su rechazo a la militarización de la zona.

"El efecto de ese asalto a manos militares se siente la ciudad, con la disminución de acceso a compras, con negocios cerrados. Ese asalto comenzó el 8 de mayo pasado. El Gobierno no va a poder mantener las protestas a raya. La gente se organiza. Uno ve la convicción de la gente y no queda otro camino que la lucha", advirtió.